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Peppino de Filippo estaba al final, morirÃa hace unos años, de una carrera teatral y cinematográfica que ya habÃa hecho historia. Ãl nos recibió sin dejar de maquillarse, frente al espejo. Ãl fue educado, cortés y servicial, y fingió no sorprenderse al encontrar a dos malditos niños frente a él. Recuerdo sus gestos calmados y metódicos mientras hacÃa el truco de la escena, que me pareció pesado, denso y muy claro. Pero recuerdo especialmente una cosa: la profunda tristeza de su mirada. Una tristeza que me impactó intensamente, porque lo percibà intensamente. Tal vez sintió que su vida habÃa llegado a su fin, o tal vez era solo la prueba de lo que siempre se habÃa dicho de los comediantes, es decir, al hacer reÃr a todos, en realidad son las personas más tristes del mundo.
Hablamos de teatro, de su hermano Eduardo, por supuesto. Ãl nos contó cómo nació el escenario, siempre por ahà con la compañÃa de familia.
Salimos después de casi una hora, un poco confundido y con la grabadora de casete llena hasta el final.
Esa no fue solo la primera entrevista de mi vida. Fue especialmente cuando me di cuenta de que el trabajo del periodista serÃa la única opción posible para mÃ. Y fue el momento en el que experimenté por primera vez esa extraña alquimia, casi una magia sutil que se establece entre el entrevistado y el entrevistador.
Una entrevista puede ser la fórmula matemática de la verdad o una actuación inútil y vanidosa. La entrevista es también un arma poderosa en manos del periodista, que tiene el poder de elegir complacer al entrevistado o servir y apasionar al lector.
En lo que a mà respecta, la entrevista también es mucho más; es una confrontación psicológica, es una sesión de psicoanálisis. En el cual tanto el entrevistado como el entrevistador permanecen involucrados.
Como Marchese de Vilallonga más tarde me dijo, en una de las entrevistas en este libro, "el secreto está en el estado de gracia que se crea cuando el periodista deja de ser tal y se convierte en el amigo a quien se le cuenta todo. También lo que no le dice a un periodistaâ.
La entrevista es la práctica del arte socrático de mayéutica, la habilidad del periodista para extraer los pensamientos más sinceros del entrevistado, de empujarlo a bajar el guardia, de sorprenderlo mientras cuenta y se cuenta sin filtros.
No siempre se logra esta magia particular. Pero cuando sucede, entonces nos enfrentamos a una buena entrevista. Algo más que una ida y vuelta estéril, nada que ver con la imprudente vanidad del periodista que solo señala una primicia .
En más de treinta años de actividad periodÃstica conocà celebridades, jefes de estado, primeros ministros, lÃderes religiosos y polÃticos. Pero debo admitir que no es con ellos que he sentido una verdadera forma de empatÃa.
Para la formación cultural, y familiar, deberÃa haberme sentido de su lado, de la parte de aquellas mujeres y hombres que estaban en el poder, que tenÃan el poder de decidir sobre el destino de millones de personas, sus vidas y, a menudo, su muerte. A veces el futuro de pueblos enteros.
Pero nunca ha sido asÃ. La empatÃa, la corriente de simpatÃa, la emoción y la excitación que sentà cuando conocà a los rebeldes, los luchadores, los que estaban listos â y lo demostraronâ a sacrificar sus vidas, a menudo tranquila y agradable, por sus ideales.
Eran un jefe revolucionario con el pasamontañas, se reunieron en una cabaña en la selva en México, o de una madre coraje que estaba tratando, con dignidad, pero con firmeza, para saber la verdad sobre el horrible final de sus hijos, desaparecidos en el Chile de Pinochet.
Ellos son los verdaderos poderosos.
Grotteria, agosto 2017
*****
Las entrevistas recogidas en este libro han sido publicadas, en un perÃodo que va desde 1993 a 2006, sobre los periódicos para los que he trabajado en el curso de los años, como enviado o el corresponsal, en su mayorÃa de América latina y el Lejano Oriente: el semanario Panorama y LâEspresso , y diarios Il Tempo, Il Corriere della Sera y La Repubblica y algunos para la RAI .
Mantuve deliberadamente la forma original en la que se escribieron, a veces en la estructura tradicional de la pregunta/respuesta, y otras veces en el más coloquial de los entrecomillados .
Elegà preceder a las entrevistas individuales con una introducción que ayudarÃa al lector a orientarse en el espacio y el tiempo en el que se crearon.
1
Subcomandante Marcos
¡Venceremos! (tarde o temprano)
Chiapas, México, San Cristóbal de Las Casas, Hotel Flamboyant. El mensaje estaba escondido debajo de la puerta de la habitación:
Es necesario partir hoy a la Selva.
Cita en la recepción a 19.
Llevar botas de montaña, una manta,
una mochila y comida enlatada.
Solo tengo una hora y media para armar estas pocas cosas. Mi objetivo es en el corazón de la jungla. En la frontera entre México y Guatemala, donde comienza la Selva Lacandona, uno de los pocos lugares del mundo completamente inexplorados. Por el momento, solo hay un "operador turÃstico" muy especial capaz de llevarme hasta allÃ. Llama al subcomandante Marcos y la Selva Lacandona es su último refugio.
*****
Lo que, todavÃa hoy, probablemente me hace sentir más orgulloso en mi carrera es, sin duda, esta reunión con el subcomandante Marcos en la selva Lacandona de Chiapas, México, en abril de 1995, por el semanario Sette del Corriere della Sera; primer periodista italiano en entrevistarlo (Realmente no sé si acababa de ir a ver al simpatizante y omnipresente Gianni Minà antes), pero mucho antes de que el mÃtico subcomandante, con su eterno pasamontañas negro, dio vida en los años siguientes a una especie de auténtica "oficina de prensa de la guerrilla" quien subÃa y bajaba de su refugio en la selva a periodistas de todas partes.
HabÃan pasado casi dos semanas desde que, en los últimos dÃas de marzo de 1995, el avión de la Ciudad de México aterrizó en el pequeño aeropuerto militar de Tuxla Gutiérrez, capital de Chiapas. En la pista rodaban aviones con insignias del ejército mexicano y vehÃculos militares apostados en los bordes. En una tierra tan grande como un tercio de Italia vivÃan tres millones de habitantes.
La mayorÃa de ellos con sangre india en las venas: doscientos cincuenta mil descendientes directos de los mayas.
Estaba en una de las áreas más pobres del mundo: el noventa por ciento de los indios no tenÃan agua potable. Sesenta y tres por ciento eran analfabetos.
Me pareció muy claro: por un lado, los terratenientes blancos, pequeños y ricos. Por otro lado, los campesinos, muchos, y quienes tomaron en promedio siete pesos: menos de diez dólares por dÃa. Para estas personas, la esperanza de sublevación comenzó el 1 de enero de 1994. Mientras México firmaba un tratado de libre comercio con los Estados Unidos y Canadá, un soldado encapuchado revolucionario declaró la guerra al paÃs: a caballo, armados con fusiles - algunos reales (pocos), otros falsos, de madera - dos mil hombres del Ejército de Liberación Nacional Zapatista ocuparon San Cristóbal de Las Casas, la antigua capital de Chiapas, Palabra de la Orden: "Tierra y libertad".
Hoy sabemos cómo terminó la primera ronda, la decisiva: los cincuenta mil soldados que fueron enviados con sus vehÃculos blindados ganaron la marea de la revuelta. ¿Y Marcos? ¿Cuál fue el final del hombre que de alguna manera habÃa revivido la leyenda de Emiliano Zapata, el héroe de la revolución mexicana de 1910?
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7 pm, Hotel Flamboyant: nuestro contacto llega a tiempo. Se llama Antonio, es un periodista mexicano que en la Selva subió no una, sino diez, veinte veces. Por supuesto, ahora no es como hace un año, cuando Marcos estaba relativamente tranquilo con su familia en el pequeño pueblo de Guadalupe Tepeyac, cerca de la Selva, armado con un teléfono móvil, computadora, conexión a Internet, preparado para recibir los enviados de tv americana. Hoy nada ha cambiado para los indios, pero para Marcos y su gente todo ha cambiado: después de la última ofensiva del gobierno, los lÃderes zapatistas realmente tuvieron que esconderse en la montaña. No hay teléfonos allÃ, no hay electricidad. Ni caminos: nada.
El colectivo (como llaman a estos extraños microbuses de taxi) corre rápido entre las curvas cerradas de la noche. En el interior hay un olor a sudor y tela húmeda. Se tarda dos horas para llegar a Ocosingo, un pueblo a las puertas de la selva. En las animadas calles, las niñas con largo cabello negro y rasgos indios se rÃen. Y tantos soldados, en todas partes. Las habitaciones del único hotel no tienen ventanas, sólo una rejilla en la puerta. Parece estar en una cárcel. En las noticias de la radio: "Hoy el padre de Marcos ha declarado: mi hijo, el profesor universitario Rafael Sebastián Guillen Vicente, 38 años, nacido en Tampico, es el subcomandante Marcos".
A la mañana siguiente tenemos un nuevo guÃa. Se llama Porfirio. Ãl también es indio.
A bordo de su camión, se necesitan casi siete horas de baches y polvo para llegar a Lacandon, el último pueblo. Ahà termina el camino de tierra. Y comienza la Selva. No llueve, pero el barro aún llega a las rodillas. Se duerme en algunas barracas en la jungla, a lo largo del trayecto. Después de dos dÃas de marcha apretada y agotadora, en la inhóspita jungla, sofocada por la humedad, llegamos a la aldea. La comunidad se llama Giardin ; estamos en el área de Montes Azules . Casi doscientas personas viven allÃ. Todos viejos, niños y mujeres. Los hombres están en guerra. Nos recibieron bien. Pocas personas saben español. Todos hablan tzeltal, el dialecto maya. "¿Encontraremos a Marcos?" Preguntamos. "Puede darse", dice Porfirio.
A las tres de la mañana nos despertamos con cuidado: debemos irnos, no hay luna, sino muchas estrellas, a media hora de marcha para llegar a una cabaña. En el interior puedes sentir la presencia de tres hombres. Es todo negro, como sus pasamontañas. En el retrato provisto por el gobierno, Marcos es un profesor graduado en filosofÃa con una tesis sobre Althusser y una especialización al Sorbona de ParÃs. Ahora, para romper el silencio en la cabaña, llega una voz en francés: "Tenemos solo veinte minutos. Prefiero hablar en español, si no hay problemas. Soy el subcomandante Marcos. Es mejor no usar la grabadora porque si la grabación fue interceptada, serÃa un problema para todos, en primer lugar para usted. Aunque oficialmente estamos en un momento de tregua, en realidad me están buscando en todos los sentidos. Pregúntame lo que quieras".
¿Por qué se hace llamar subcomandante?
Dicen de mÃ: "Marcos es el jefe". No es verdad Los lÃderes son ellos, el pueblo zapatista, solo tengo funciones de responsabilidad militar. Me instruyeron para hablar porque sé español. Mis compañeros hablan a través de mÃ. Solo obedezco
Diez años de clandestinidad son muchos... ¿Cómo vives en la montaña?
Leo. De los doce libros que traje conmigo en la Selva, uno es el Canto General , de Pablo Neruda. Otro es el de Don Quijote ...
Y ¿entonces?
Y luego los dÃas, los años pasan en nuestra lucha. Ver la misma pobreza todos los dÃas, la misma injusticia... No puedes quedarte aquà sin el deseo de luchar, cambiar, aumentar. A menos que seas un cÃnico o un hijo de puta. Luego están las cosas que los periodistas generalmente no me preguntan. Y es que aquà en la Selva, a veces, debemos comer ratones y beber la orina de los compañeros para no morir de sed en largas transferencias... todo acá.
¿Qué falta? ¿Qué ha dejado?
Me falta el azúcar. Y un par de medias secas. Siempre mantener los pies mojados, dÃa y noche, en el frÃo, es algo que no deseo para nadie. Y luego el azúcar: es lo único que la Selva no te da, tienes que hacer que venga de lejos, para la fatiga fÃsica serÃa necesario. Para aquellos de nosotros que venimos de la ciudad, ciertos recuerdos son una especie de masoquismo. Repetimos: "¿Recuerdas los helados de Coyoacán? ¿Y los tacos de la División del Norte? Recuerdos. Aquà si se captura un faisán u otro animal hace falta esperar tres o cuatro horas para que esté listo, Y si la tropa está desesperada por el hambre y lo come crudo, al dÃa siguiente es diarrea para todos. Aquà la vida es diferente, todo se ve de otra forma... Ah, sÃ, me preguntó qué dejé en la ciudad. Un boleto para el metro, una montaña de libros, un cuaderno lleno de poesÃa... y algunos amigos. No muchos, algunos.
¿Cuándo mostrará su cara?
No lo sé. Creo que nuestro pasa-montañas también tiene un significado ideológico positivo, corresponde a la concepción de nuestra revolución, que no es individual, que no tiene cabeza. Todos somos Marcos con el pasa-montañas.
Pero para el gobierno, ella esconde su rostro porque tiene algo que esconder...
Esos no entendieron nada. Pero el verdadero problema no es ni siquiera el gobierno, sino las fuerzas reaccionarias de Chiapas, los agricultores y los terratenientes de la zona, con sus "guardias blancas" privadas. No creo que haya mucha diferencia entre la actitud racista tradicional de un hombre blanco de Sudáfrica contra un hombre negro y la de un terrateniente de Chiapas en comparación con un indio. Aquà la esperanza de vida para un indio es de 50-60 años para los hombres y 45-50 para las mujeres.
¿Y los niños?
La mortalidad infantil es muy alta. Ahora también le cuento la historia de Paticha. Una vez, hace algún tiempo, al pasar de un área de la Selva a otra, pasamos por una pequeña comunidad, muy pobre, donde un camarada zapatista siempre nos recibÃa con una niña de tres a cuatro años. Llamaron a Patricia, pero su nombre lo pronunció como "Paticha". Le pregunté qué querÃa hacer cuando fuera grande, y ella siempre me respondió: "la guerrilla". Una noche la encontramos con fiebre alta. No tenÃamos antibióticos y habrá tenido cuarenta o más fiebre. La ropa mojada se secó sobre ella como una estufa. Ella murió en mis brazos. Patricia no tenÃa un certificado de nacimiento. Y no tenÃa uno de muerte. Para México nunca existió, ni siquiera su muerte ha existido alguna vez. AquÃ, esta es la realidad de los Indios de Chiapas.
El Movimiento Zapatista ha socavado todo el sistema polÃtico mexicano, pero no ha ganado.
México necesita democracia y personas por encima de las partes que la garanticen. Si nuestra lucha fuera útil a alcanzar este objetivo, no habrá sido una lucha vana. Pero el ejército Zapatista no se convertirá nunca en un partido polÃtico. Desaparecerá. Y el dÃa en que esto suceda significará que tendremos democracia.
¿Y si esto no sucede?
Militarmente estamos rodeados. La verdad es que difÃcilmente el gobierno querrá ceder porque el Chiapas y la selva Lacandona en particular, literalmente flotan sobre un mar de petróleo. Y el petróleo de Chiapas es la garantÃa que el estado mexicano le ha dado a los Estados Unidos por los miles de millones de dólares que Estados Unidos le ha prestado. No puede mostrarles a los estadounidenses que no tiene el control de la situación.
¿Y tú?
Nosotros, sin embargo, no tenemos nada que perder. Y la nuestra es una lucha por la supervivencia y por una paz digna.
La nuestra es una lucha justa.
2
Peter Gabriel
El duende del Rock
Cada una de sus actuaciones (raras) el mÃtico fundador y lÃder de Génesis confirma que su apetito por todas las formas de experimentación musical, cultural y tecnológica es verdaderamente ilimitado.
Conocà a Peter Gabriel para esta entrevista exclusiva durante el evento musical "Sonoria", tres dÃas milaneses completamente dedicados al rock. En dos horas de gran música, Gabriel cantó, bailó y saltó como un resorte, involucrando al público en un espectáculo que, como siempre, fue mucho más allá de un simple concierto de rock.
Al final del concierto me invitó a subir con él en la limusina que lo llevó y mientras corrÃamos hacia el aeropuerto me contó sobre él, sus planes futuros, el compromiso social contra el racismo y la injusticia junto a AmnistÃa Internacional, de su pasión por las tecnologÃas multimedia y los secretos del nuevo álbum, «Secret World Live», que estaba a punto de lanzarse en todo el mundo.
¿El fin del racismo en Sudáfrica, el fin del apartheid; también ha sido una victoria del rock?
Fue una victoria del pueblo sudafricano. Pero creo que la música rock ha contribuido a este resultado, de alguna manera ha asistido.
¿De qué manera?
Creo que los músicos han hecho mucho para elevar el nivel de conciencia de la opinión pública europea y estadounidense a este problema. Yo también he escrito canciones como "Biko", para hacer de modo que los polÃticos de muchos paÃses sustentaran las sanciones contra Sudáfrica e hicieran presión. Estas son pequeñas cosas que no cambiarán el mundo, pero marcarán la diferencia, una pequeña diferencia que nos involucra a todos. No siempre son las grandes manifestaciones, los gestos descarados, para obtener lo mejor de la injusticia.
¿En qué sentido?
Te daré un ejemplo. En los Estados Unidos hay dos ancianas del Medio Oeste que son los hombres del saco de todos los torturadores de América Latina. Pasan tiempo escribiendo a los directores de las prisiones, sin respiro. Y al estar muy bien informados, a menudo sus cartas se publican con gran evidencia en los periódicos estadounidenses. Y asà como sucede a menudo que los presos polÃticos de los que han difundido los nombres comienzan, casi por milagro, a ser dejados en paz. Quiero decir esto cuando hablo de pequeñas diferencias. ¡Después de todo, nuestra música es como su carta!
Su compromiso contra el racismo está estrechamente relacionado con la actividad de su sello, el Real World, en favor de la música étnica...
Absolutamente. Para mà fue una gran satisfacción reunir a músicos tan diferentes, de paÃses tan distantes, de China a Indonesia, de Rusia a Ãfrica. Hemos producido a artistas como los chinos Guo Brothers o el paquistanà Nusrat Fateh. En sus trabajos, como en los de los otros músicos del Real World, sentà mucha inspiración. El ritmo, las armonÃas, las voces... Desde 1982, después de todo, habÃa comenzado a trabajar en esta dirección, organizando el festival Bath, que era, después de todo, la primera aparición pública de una asociación que acababa de fundar y se llamaba "Womad - World of Music Arts and Dance". AllÃ, las personas podÃan participar activamente en el evento, jugando en muchas etapas junto con grupos africanos. En resumen, fue una experiencia tan emocionante y significativa que, posteriormente, se repitió en muchas partes del mundo: Japón, España, Tel Aviv, Francia...
¿Es por eso que eres considerado el inventor de World Music?
Real World y World Music son sobre todo una marca comercial, que publica música de artistas de todo el mundo para que la música pueda llegar a todo el mundo, en tiendas de discos, en radios... Pero espero que esta etiqueta desaparezca pronto, cuando los artistas que me afectan se hagan famosos. En resumen, me gustarÃa lo que pasó con Bob Marley y la música reggae: la gente ya no dice "es reggae", dice "es Bob Marley". Espero que, poco a poco, que nadie venga a decir que la mayorÃa de mis artistas "¿es World Music?"
Ãltimamente has mostrado un gran interés en las tecnologÃas multimedia. Su CD-ROM «Xplora1» ha despertado un enorme interés. ¿Cómo se relaciona todo esto con la actividad del Real World?
En este CD-ROM puedes hacer muchas cosas, incluso elegir las canciones de los artistas individuales haciendo clic en la portada del álbum. Pero me gustarÃa muchas más cosas de este tipo, porque la interactividad es un medio de hacer que la música llegue a las personas que no saben mucho. Después de todo, lo que Real World está tratando de hacer es fundir la música tradicional, hecha a mano, por asà decirlo, con las nuevas posibilidades que ofrece la tecnologÃa.
Esto significa que, para ella, la música rock ahora no es suficiente en sà mismo, tiene necesidad de la intervención del oyente. ¿Te gustarÃa que todos tengan en sus manos el producto de rock?
No siempre. Yo, por ejemplo, la mayorÃa de las veces escucho música en el automóvil, y no quiero necesitar una pantalla o una computadora para hacerlo. Pero cuando estoy interesado en un artista, o si quiero saber algo más sobre su historia, de dónde viene, qué piensa, quién es, luego, con multimedia, tengo un material visual que me satisface. En Resumen, me gustarÃa que todos los CDs tuvieran, en el futuro, estos dos niveles de disfrute: ser simplemente escuchado, o venir literalmente "explorado". En "Xplora1" quisimos construir un pequeño mundo en el que la gente pueda moverse y decidir, tomar decisiones e interactuar con el medio ambiente y con la música. Dentro del CD puedes hacer un montón de cosas. Cómo visitar virtualmente Real World Recording Studios, acceder a muchos eventos (los premios Grammy o el festival WOMAD, entre otros), escuchar piezas de conciertos, volver sobre mi carrera desde el Génesis hasta hoy y, finalmente, re mezclar mis canciones como lo desee.
E incluso hurgar en su armario, siempre de forma virtual, significa...
Es verdad ( risas ). ¡Incluso puedes hurgar en el armario de Peter Gabriel!
Todo esto parece estar a años luz de la experiencia de Génesis. ¿Qué quedó de esos años? ¿Alguna vez quisiste, por ejemplo, hacer otra ópera rock como "The Lamb lies on Broadway"? ¿Y todo superado?
No es fácil de contestar. Creo que todavÃa estoy interesado en algunas de esas ideas, pero de una manera diferente. En cierto modo, lo que estaba tratando de hacer en el último perÃodo con Genesis estaba relacionado con la multimedia. En aquel momento la sensibilidad del sonido fue limitada por la tecnologÃa de la época. Ahora me gustarÃa ir mucho más lejos en este camino...
Volviendo a su compromiso polÃtico y humanitario, después del fin del apartheid, ¿cuáles son sus otros proyectos en este sentido, las causas de la injusticia en el mundo contra el cual luchar?
Son muchos. Pero ahora mismo, creo que lo más importante es ayudar a las personas a producir testimonios. Por ejemplo, dar a todos la capacidad de fotografiar con una cámara o tener herramientas de comunicación, como máquinas de fax, computadoras, etc. En resumen, creo que hoy existe la posibilidad de utilizar la tecnologÃa de redes de comunicación para fortalecer la defensa de los derechos humanos.
Muy interesante ¿Puedes dar un ejemplo concreto?
Quiero perseguir objetivos tangibles pequeños. Por ejemplo, transformar la vida de un pueblo a través de estas herramientas de comunicación: conexiones telefónicas, veinte o treinta computadoras personales, etc. Los "paquetes" de este tipo se pueden instalar en cualquier pueblo del mundo, en la India, en China, en una montaña... Entonces, en tres o cinco años, podrÃa enseñar a la gente sobre esos lugares para convertirse en creadores de información, administrarlos, trátalos. Esto permitirÃa transformar la economÃa de muchos paÃses con un esfuerzo modesto, dándoles la oportunidad de pasar de la economÃa agrÃcola a la basada en la información. Sin duda serÃa positivo.
¿Cuáles son tus planes futuros?
Unas vacaciones ( risas ) Hemos estado de gira por muchos meses. A veces nos detuvimos, pero creo que necesito escapar. En el recorrido siempre está el estrés del tiempo, del viaje... y luego la imposibilidad de hacer deporte. Juego mucho tenis, por ejemplo. En cuanto al trabajo, estoy pensando en algo más como el CD-ROM. Por ahora, he terminado mi nuevo álbum "Secret World Live", un doble CD grabado en vivo durante el transcurso de esta larga gira. Es, en verdad, el resumen de lo que he hecho hasta la fecha, una especie de antologÃa con una sola pieza que podrÃa definirse como semi-inédita, "Across the River". En la parte inferior del álbum también hay una manera de agradecer a todos los que jugaron conmigo en esta agotadora gira. Desde el "habitué" como Tony Levin o David Rhodes a Billy Cobham y Paula Cole, quienes también me acompañaron a Milán, el primero en la baterÃa y la segunda como vocalista.
¿Tienes un deseo, un sueño?
DesearÃa que ya existieran los Estados Unidos de Europa.
¿Porqué?
Porque ahora está claro que los paÃses pequeños ya no pueden ser importantes en la economÃa mundial. Se necesita un cuerpo que los represente con respecto al resto del mundo, de los mercados futuros, protegiendo su identidad cultural. Es necesario tener una representación económica compacta, un sindicato para sobrevivir, para competir especialmente con aquellos lugares donde la mano de obra cuesta poco. Y luego romper esta división del mundo en dos modelos, el de la Europa blanca, el histórico, y el de los paÃses pobres para ser explotados. DeberÃamos celebrar las diferencias entre las personas de cada paÃs, no tratar de hacer que todos sean iguales.
3
Claudia Schiffer
La más bella de todas
Ha sido la más bonita del mundo, la más paga y, todo sumado, también la más castigada. "Soy la única modelo de la que nunca se ha visto un pechoâ declaró orgullosa. Incluso su contrato multimillonario con Revlon le prohibió mostrarse sin velos.